Cuando cepillarse los dientes es ecológico

Hora de lavarse los dientes

Han sido ya varios artículos en los que hemos compartido con vosotros una comida en una huerta ecológica nuestra experiencia haciendo nuestro propio pan o el uso del limón como remedio casero para pequeñas dolencias o malestar.

Y después de disfrutar de la pitanza, lo que toca, a no ser que se sea un poco guarrete, es lavarnos los dientes.

Hemos oído muchas veces, que no se debe tragar la pasta de dientes. En la web De10.mx hacen un análisis y un listado de diez sustancias nocivas que tiene el dentífrico y que son perjudiciales para la salud. Por lo tanto, tenemos en ese listado 10 razones para mantenerla lejos de nuestro estómago.

Entonces, ¿no nos lavamos los dientes?

¿Recurrimos a otras formas más curiosas aunque históricas y reales?

Podemos recurrir también a un cepillo de dientes ecológico.

Un ejemplo de estos son los cepillos de dientes fotoeléctricos que requieren únicamente agua y luz para desprender iones de titanio que desintegran la placa dental y las bacterias perjudiciales.

La respuesta es simple, recurramos a una forma ecológica de lavarnos los dientes, bien haciendo nosotros nuestra propia pasta de dientes casera, o bien comprar una pasta de dientes ya fabricada por un laboratorio y que cuente con la certificación Ecocert lo que nos asegura que es un producto que cumple con la normativa europea que regula los productos ecológicos.

Pasta de dientes casera

Otra opción que tenemos, es hacer nuestra propia pasta de dientes casera como hemos dicho unas líneas más atrás. Una receta que se puede hacer fácilmente en casa, es la que os ponemos a continuación.

Receta de pasta de dientes casera

Ingredientes:

– 1 vaso de agua.

– 1 tazón de arcilla verde.

– Romero y hierbabuena.*

Preparación:

– Primero preparamos una decocción: ponemos el agua en un cazo (mejor si es de barro), con un buen ramillete de romero troceado y unas hojas de hierbabuena, tapamos y dejamos que llegue a punto de ebullición.

– Retiramos el cazo en cuanto hierva y lo dejamos reposar un par de minutos (tapado para que las plantas no pierdan sus propiedades*).

– A continuación colamos la decocción y la vamos mezclando, poco a poco, con la arcilla hasta conseguir la consistencia de la pasta de dientes y… ¡¡lista!!.

La mezcla resultante no tendrá sabor ni olor.

Podemos echarle un par de gotas de esencia de hierbabuena para hacerla más apetecible y un poco de acíbar de aloe vera. El aloe lo puedes encontrar en los herborarios, pero se puede comprar una planta de aloe en casi cualquier jardinería.

Esta opción es mucho más barata y es muy útil tenerla en casa, sobre todo en la cocina.

Si te haces un pequeño corte o te quemas, corta un trozo de aloe, verás que dentro contiene una gelatina, frótala en la zona de la piel dañada, te aliviará y ayudará a cicatrizar las heridas.

*El romero tiene propiedades analgésicas, antiparasitarias y antisépticas; la hierbabuena esta indicada para problemas de halitosis. Cualquier otra planta con indicaciones similares y con buen sabor sirve para preparar esta mezcla. Y si os animáis a hacerla, estaremos encantados de que compartáis las fotos y las impresiones en nuestro muro de Facebook.