Queremos Verde

Quedan apenas 3 semanas para que el verano llegue oficialmente y tenemos que empezar a prepararnos para aprovechar al máximo las posibilidades que nos ofrece de cara a contribuir a conseguir un mundo sostenible y ecológico.
Uno de los principales cambios que se produce en veranos sobre nosotros mismos, es la dieta, que pasa a ser más ligera que en invierno, más ensaladas, frutas, el gazpacho… aumentamos la cantidad de vegetales con lo que aumentamos también el consumo de agua para su cocción, lavado… agua que podemos aprovechar después para regar nuestras plantas, por ejemplo, o los restos de estos alimentos vegetales frescos para proveer de alimento a nuestras lombrices en la vermicompostadora para conseguir nuestro propio compost.
También la ropa que nos ponemos cada día cambia. Y ser sostenible no es incompatible con ir a la última si somos más coquetos, o ir cómodo si somos más pragmáticos. Con el calor, los tejidos naturales y ligeros, con el lino a la cabeza, nos da la opción de elegir prendas confeccionadas con materias primas ecológicas, que además evitarán problemas de irritaciones y otros que sufren quiénes nos rodean como el olor corporal provocado por las fibras sintéticas que no transpiran.
En casa, podemos aprovechar la mayor cantidad de horas de luz para evitar encender bombillas de forma innecesaria, o aprovechar el sol para secar la ropa y así evitar utilizar la secadora, o si disponemos de un cargador solar para nuestro móvil, usar el sol para ello y así también reducimos la factura de la luz, que en estos tiempos de crisis es de agradecer.
Y también el cuerpo nos pide más actividad, como si con el calor nos activáramos y se nos cargaran las pilas. Es el momento de plantearnos ir a trabajar en bicicleta si podemos, caminando, al alcance únicamente de unos pocos privilegiados, o en transporte público, donde además podremos aprovechar para leer o pensar donde vamos a pasar nuestras vacaciones, donde el ecoturismo es una apuesta segura para unas vacaciones ideales.