En una olla a modo de jacuzzi dejamos a fuego lento cebolla, apio, nabo, alcachofa, ajo verde, espinaca y col para que vayan haciendo un caldo rico y oxidante.
Y mientras se acomodan y relajan van soltando su jugo exquisito.
Al final del «baño» obtendremos un caldo que como diría Super Ratón es supervitaminante y supermineralizante, un caldo oxidante y muy alcalino.
Un caldo que podemos rematar añadiendo un chorrito de zumo de limón.
Este consomé va a alcalinizar tu cuerpo, limpiarlo y drenarlo.
Una limpieza de vez en cuando viene bien, este caldo, es además un alimento muy medicinal es épocas de baja salud, indigestiones, cólicos, problemas hepáticos, etc…
No obstante, no tiene por qué considerarse un alimento para enfermos.
Ni mucho menos, este es un consomé vegetariano riquísimo para cualquier momento del año.
Especialmente en invierno, abriendo el apetito al comienzo de las comidas y pudiendo ser tomado solo o por ejemplo con un poquito de cebolleta tierna cruda picada muy fina.
Os animamos a que lo probéis y disfrutéis de este caldo oxidante tan rico y saludable.
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