Bioconstrucción, la medicina inmobiliaria.
A veces creo que el autor del cuento de los tres cerditos debió haber sido un promotor inmobiliario porque no sabría decir si este cuento ha tenido una repercusión positiva o no en la biocontrucción, pues parece que el único material bueno, según la fábula, es el ladrillo de toda la vida, indicando el autor que quiénes no trabajan de esta manera son perezosos…
Bueno, bromas aparte, pero sin dejar totalmente de lado esta opinión generalizada sobre el ladrillo, podríamos valorar la situación actual de la bioconstrucción.
A todos nos gusta mirar revistas con casas espectaculares, domotizadas o ver esos crecientes programas donde la gente enseña sus viviendas (con todo tan casualmente situado) contruidas con materiales último modelo… ¿pero cuántas de estas casas tienen realmente un bajo impacto medioambiental?
A mi modo de ver, creo que socialmente le damos más importancia a la estética y comodidad, muchas veces persuadidos por miles de anuncios publicitarios, y olvidamos cosas verdaderamente básicas, y deberíamos por tanto valorar también la interacción que ésta tiene con el medio, buscando métodos alternativos, basados en las tradicionales formas de construcción.
Respecto a los materiales, el ladrillo puede ser una opción pero ¿por qué no convertirlos en ladrillos de adobe?
Es algo que se ha hecho desde siempre y aún hoy existen casas centenarias construidas con madera y adobe. También podemos obtener buenos resultados con cañas, tierra prensada (parte de la Gran Muralla China esta construida de esta manera), materiales reciclados varios y cómo no, las balas de paja que tanto problema le causaron a nuestro primer cerdito, pero que a día de hoy resulta ser un material con unos resultados excelentes, protegiendo del frío y el calor, de la humedad y el fuego ¡sí, el fuego!
Materiales y técnicas las hay de muy diversos tipos, pudiendo adaptar la que más nos interese según la zona en la que vivamos. El problema, sin embargo, viene por otro sendero… la legislación, que no contempla este tipo de materiales de la misma manera que hace con el ladrillo y las estructuras arquitectónicas modernas, siendo estos los materiales estrella de hoy en día. Pero aún con mayor dificultad, si es posible legalizar construcciones de este tipo y también asegurarlas y por supuesto tener una casa totalmente ecológica y que nada tenga que envidiar estéticamente a esas casas de las revistas.
Os dejamos enlaces con más información:
Preguntas frecuentes sobre construcción con paja
Y por supuesto un libro que abarca todos los aspectos de la bioconstrucción y que puedes conseguir fácilmente por internet, Cantos del arquitecto descalzo de Johan van Lengen.
Hoy ya es posible construir casas con materiales más naturales completamente legales. La normativa permite justificar su uso sin necesidad de limitarse a las soluciones convencionales.
Así que ánimo. ¡Buen trabajo!